La astaxantina (3,3’-dihidroxi-β, β-1-caroteno-4,4’-diona) es un pigmento rojo que pertenece a la familia de las xantofilas, que, junto a los carotenos, constituyen una de las más de 600 clases de moléculas conocidas colectivamente como carotenoides.
A menudo denominadas «derivados oxigenados de los carotenos”, las xantofilas contienen uno o más grupos funcionales que contienen oxígeno, y son comúnmente reconocidos por sus propiedades antioxidantes (Li 2020). La astaxantina no es una excepción a esto y se considera uno de los antioxidantes más potentes de la naturaleza.
De las propiedades de la astaxantina que promueven la salud, la más conocida es su alta actividad antioxidante. Los carotenoides son los responsables de la pigmentación en animales, plantas y microorganismos, pero también ejercen papeles importantes en los sistemas biológicos (según recientes investigaciones centradas en sus capacidades antioxidantes).
Un antioxidante funciona eliminando los radicales libres de un sistema al reaccionar con ellos para formar compuestos inocuos. Aunque los radicales libres son necesarios para sustentar los procesos vitales, las cantidades excesivas pueden ser peligrosas debido a su alta reactividad, causando daño a compuestos celulares como el ADN y los carbohidratos (Higuera- Ciapara 2007). El daño oxidativo de las biomoléculas puede provocar enfermedades crónicas, como enfermedades cardiovasculares, inflamación crónica y artritis reumatoide (Uttara 2009).
Se cree que los antioxidantes pueden interrumpir la propagación de radicales libres y, por tanto, reducir el estrés oxidativo. La característica más notable de los carotenoides es su columna vertebral de polieno que consta de una serie de enlaces C = C conjugados. Si bien esto es responsable de la fuerte coloración de los pigmentos carotenoides, también se cree que los dobles enlaces pueden ayudar a eliminar electrones de alta energía, lo que les permite funcionar como antioxidantes eficaces (Young 2018).
Además, la astaxantina adopta una posición superior en la membrana celular como resultado de sus grupos terminales, lo que le permite enlazar desde adentro hacia afuera y proporcionar una protección resistente contra el estrés oxidativo (Yuan 2011, Sztretye 2019). Como tal, la molécula puede apagar los radicales libres en las capas interna y externa de la membrana, a diferencia de la mayoría de los antioxidantes que funcionan en una sola capa.

Como antioxidante natural, también se cree que la astaxantina tiene un papel en la protección contra la luz ultravioleta, la inflamación y otras áreas de la salud, teniendo en cuenta las investigaciones existentes (Guerin 2003).
Como resultado de su capacidad antioxidante, se cree que la astaxantina ayuda a la mejora de la función de las células inmunitarias. Como las células inmunes contienen una alta cantidad de grasas poliinsaturadas, son particularmente susceptibles al daño de los radicales libres (Park 2011).
Dosis y Absorción
Dosis: La dosis recomendada de astaxantina no es definitiva y depende del motivo del cliente para tomarla. Se sugiere un rango de dosificación de 2- 12 mg.
Absorción: Tómela con alimentos para una máxima absorción. Al igual que con cualquier complemento alimenticio, asegúrese de verificar las interacciones enumeradas y busque la aprobación médica antes de utilizar astaxantina como suplemento nutricional.